Estás realizando una llamada desde tu país a otro, sea por el método tradicional (y caro) desde fijo, usando en España el 902 ó incluso desde móvil, el que paga la llamada eres tú.
Por regla general, la persona que es llamada no tiene que pagar ningún extra, pues el tramo local de recepción es, casi en todos los casos, gratuito para la persona que recibe la llamada. Eso sí, hay contratos (abusivos) de móvil en alguna parte del planeta que se quieran aprovechar de esta situación, o llamadas que son de por sí muy caras, como las realizadas por satélite, en alta mar o zonas despobladas.
Lo mejor para asegurarse de cualquier coste, y aunque sea tedioso, es que el usuario "llamado" se informe en las condiciones de su contrato telefónico si le pueden cobrar por recibir llamadas.